Las normas de Internet las pondrán quienes habiten en Internet.
Ahora bien, si hay una alternativa en software libre al programa que su industria usa y él insiste en pagar por otro propietario, la lógica pondrá las cosas en su sitio y esta empresa se irá a pique, porque sin duda pierde competitividad quien paga por algo que puede conseguir gratis y, además, con la posibilidad de mejorarlo.
Microsoft y Apple son el símbolo de los últimos modelos de negocio basados en la propiedad del conocimiento. Para ambos ya hay alternativas libres
Eben Moglen. (Software Freedom Law Center)